Amada,
prepararías alimento para el hombre?
Atormentada por el poder que carga, la bestia declaró:
"Te hago sentir. Te doy placer.
Gozas conmigo, porque te doy fuerte
y suave al mismo tiempo.
Y tengo autoridad, y por eso te doy. Siempre"
... Se me cierran los ojos en lo primaveral del día
y estoy cerca de tocar con mi cuerpo entero
la tierra de dónde provengo.
Me siento volver,
por Dios pido que no me quiten ni el sol ni la danza,
mientras al cielo contemplo buscando
quién me abrace...
Copiaré tu honesto pensar para no ser lastimado
en lo que resta del día, y que bueno que sonrías
porque estoy volviendo a casa.
Para verte al fin, y sólo pensar que la delicadeza
merece ser tratada con guantes de seda.
Vení, fundite en mí,
yo haré lo mismo en vos.